Materiales desechables en salud: ¿sostenibilidad o seguridad del paciente?

Materiales desechables en salud: ¿sostenibilidad o seguridad del paciente?

El debate entre el uso de insumos reutilizables y desechables en servicios de salud no es nuevo. Como en otros sectores, muchas instituciones han transitado de lo reutilizable a lo desechable —y en algunos casos, de vuelta a lo reutilizable—. ¿Qué factores deberían guiar esta decisión? La respuesta no es simple: hay un dilema entre cuidado ambiental y seguridad clínica.

El impacto ambiental de los desechables

Desde una perspectiva ecológica, el uso masivo de materiales desechables genera toneladas de residuos sanitarios cada año. Esto no solo representa un reto logístico, sino también un serio problema ambiental. Reducir estos residuos es una necesidad urgente, y la reutilización controlada aparece como una posible solución sostenible.

¿Pero qué pasa con la seguridad del paciente?

En el contexto hospitalario, la decisión de reutilizar no puede depender únicamente de los costos o del impacto ambiental. La seguridad del paciente está en juego.

Se estima que entre el 5 % y el 15 % de los pacientes hospitalizados sufre alguna infección asociada a la atención médica (IAAS). Lo más preocupante es que casi la mitad de estas infecciones están vinculadas con dispositivos médicos reutilizables.

Reutilización: ¿una práctica segura?

Instrumentos como endoscopios, laringoscopios o insumos quirúrgicos requieren procesos minuciosos de limpieza, desinfección, esterilización y trazabilidad. El más mínimo fallo en estos procesos —por falta de capacitación, supervisión o mantenimiento— puede poner en riesgo la vida del paciente.

Reutilizar no es, por sí solo, una práctica insegura, pero sí exige condiciones clínicas estrictas:

  • Protocolos estandarizados
  • Personal capacitado
  • Equipos de esterilización funcionales
  • Registros de trazabilidad confiables

¿Es posible equilibrar sostenibilidad y seguridad?

El reto está en lograr un equilibrio: proteger al paciente sin ignorar el impacto ambiental del sistema de salud. En este contexto, algunas estrategias viables podrían ser:

  • Reutilizar solo cuando se garantice la bioseguridad
  • Priorizar desechables biodegradables o reciclables
  • Invertir en tecnologías de esterilización más eficientes
  • Promover una gestión responsable de residuos sanitarios

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¿Has trabajado en entornos donde se reutilizan materiales médicos? ¿Qué prácticas te han parecido seguras o riesgosas?
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