Cirugía de rodilla que se complica
El día de hoy vamos a hablar sobre otro caso que encontré en portales de noticias, en el que exponen que un menor de 14 años acude a un hospital en la ciudad de Guadalajara, para una cirugía de rodilla. Durante la inducción anestésica para el procedimiento, la nota reporta “se le suministró una dosis de anestésico que le provocó un paro cardiaco, dejándole graves secuelas a niveles orgánicos y físicos”.
El paciente es posteriormente trasladado a otro hospital, en donde le tratan y lo egresan por mejoría, pero refieren que el menor quedó con secuelas neurológicas, confinado a cama. Lo reportan como “en estado vegetativo, no puede articular una serie de palabras”.
Como suele ser, al ver estos casos en los medios suelen contar con información incompleta, pero lo que entiendo del caso es que el paciente iba a ser sometido a una cirugía de rodilla (no se especifica el tipo de procedimiento) y durante la inducción anestésica el paciente presenta paro cardiorrespiratorio, por lo que seguramente lo habrán reanimado y sacado del paro, pero con secuelas neurológicas y físicas, con daño suficiente para que el paciente quede confinado a cama, sin poder comunicarse.
Con esta información, que insisto es escasa, el incidente podría ser si una respuesta a fármacos (que no necesariamente condiciona a una “negligencia” o error médico”) pudiera ser una reacción alérgica.
Sin embargo, si analizando el caso, con la información completa, se identifica que la dosis no fue la adecuada, podría si considerarse como un error, o negligencia.
Ustedes ¿Qué opinan? ¿Consideran que este es un caso de negligencia, o de una complicación comprendida en los riesgos de un procedimiento quirúrgico? Los invitamos a participar con nosotros en los comentarios.
Dr. Bernardo Rea Ruanova
Administrador de Riesgos
Grupo Mexicano de Seguros