Condiciones de peligro: pacientes hospitalizados
Cuando un paciente es admitido en un hospital esperan que su salud mejore y que el problema de salud que los aqueja se solucione. Sin embargo no siempre es así, cada año miles de pacientes presentan complicaciones y eventos adversos derivadas del tratamiento y atención médica recibida que por la enfermedad o patología propia.
En México se ha calculado que la prevalencia de eventos adversos en pacientes hospitalizados es del 9,1%. Siendo el 75 % de los casos eventos adversos prevenibles. Según el Observatorio del desempeño hospitalario en 2006 se calculó el gasto derivado de estos eventos adversos en 1,500 millones de dólares, por lo que es considerado desde entonces como un problema potencialmente grave y prevenible con un gran impacto económico y social.
1. Caídas: un paciente que sufre una caída en un hospital es responsabilidad del hospital. Las caídas no solo producen fracturas o lesiones internas, también proceden un incremento en la estancia hospitalaria incrementando costos y riesgos asociados.
Los hospitales deben realizar riesgos de caídas a todos los pacientes hospitalizados a su ingreso y establecer los niveles de intervención de enfermería para la prevención de caídas así como la educación al paciente y a sus familiares sobre el riesgo y sobre los cuidados y precauciones que se deben tomar.
2. Uso de antibióticos: más de la mitad de los pacientes hospitalizados reciben terapia con antibiótico durante la estancia en una unidad hospitalaria. El uso inapropiado y discriminado de antibióticos de amplio espectro genera resistencia microbiana y ponen en riesgo a los pacientes de desarrollar infecciones oportunistas como el Clostridium difficile. Se calcula que alrededor de 250,000 personas desarrollan infección por C. difficile anualmente.
Los hospitales deben contar con un departamento de vigilancia epidemiológica y farmacovigilancia que regule la utilización juiciosa de los antibióticos de amplio espectro y esté al pendiente de los cultivos realizados en pacientes y en áreas hospitalarias críticas para conocer la microbiología propia de cada institución.
3. Errores en el manejo de medicamentos: los errores en la administración de medicamentos constituyen la causa más frecuente de errores médicos que ocurren en hospitales. Estos incluyen errores en la dosificación, medicamentos no administrados a tiempo, o confusión de pacientes al recibir fármacos intravenosos.
Los hospitales deben contar con la unidad de farmacovigilancia que coordine el reporte y puesta en marcha de acciones seguras para el manejo de medicamentos por parte del personal médico y de enfermería.
4. Inmovilización prolongada: las úlceras de decúbito son un riesgo prevenible y se utilizan como indicador de calidad en servicios hospitalarios. Los pacientes encamados en las áreas críticas del hospital como terapia intensiva y terapia intermedia así como la unidad de quemados son los pacientes con mayor riesgo de úlceras de decúbito.
De acuerdo a un estudio realizado en el Hospital Johns Hopkins en los Estados Unidos, los pacientes que tienen periodos de inmovilización en cama prolongados son más propensos a sufrir caídas intrahospitalarias.
Los hospitales deben generar un programa de deambulación temprana para pacientes postoperados así como un programa de movilización y cambios de posición en pacientes hospitalizados en las unidades críticas.
5. Egreso Hospitalario: uno de los momentos más riesgosos en la atención de un paciente es cuando este sale del Hospital y se deben realizar numerosas instrucciones y coordinar el tratamiento posterior en consulta externa de cada paciente. En un estudio realizado por el la «Patient Safety Foundation» de los Estados Unidos reveló que el 40% de los pacientes reingresado en 5 hospitales la razón principal del reingreso pudo ser prevenida coordinando adecuadamente el tratamiento en casa y en nivel de atención.
En los Hospitales se debe de hacer un esfuerzo mayor para coordinar el egreso del paciente haciendo un gran hincapié en la educación del paciente y sus familiares así como coordinar adecuadamente el tratamiento entre los diferentes niveles de atención del sistema de salud.
Dr. Fernando Pérez Galaz **
Administrador de Riesgos Clínicos,
Grupo Mexicano de Seguros.
** Cirujano General especialista en Cirugía Gastrointestinal, Bariátrica y Metabólica.