Síndrome de muerte de cuna: SIDS

El síndrome de muerte súbita (SIDS por sus siglas en inglés) es el diagnóstico utilizado cuando un niño menor de un año muere repentinamente y no se puede determinar una causa exacta de su muerte aun después de realizar una investigación médica y legal exhaustiva, incluyendo la autopsia. Es devastador para las familias debido a que ocurre inesperadamente.

Es la causa principal de muerte en bebés de entre 1 mes y 1 año en EE.UU. Aproximadamente 2,300 bebés mueren por SIDS cada año. Afecta más frecuentemente a bebés que tienen entre a y 4 meses de edad, y en el 90% de los casos a bebés menores de 6 meses.

Se le conoce también como “Muerte de Cuna”, porque sucede con mayor frecuencia cuando los bebés duermes, generalmente entre las 10 de la noche y las 10 de la mañana. Sin embargo un estudio publicado por la revista Pediatrics, revela que el 20% de las muertes por SIDS suceden en guarderías.

En el año 2000, la Academia Estadounidense de Pediatría (AAP por sus siglas en inglés) realizó investigaciones que demuestran que la posición para poner a dormir a un bebé debe ser boca arriba.

CAUSAS DE LA MUERTE.

La mayoría de los expertos creen que la muerte súbita sucede cuando un bebé tiene una “vulnerabilidad” subyacente (por ejemplo: funcionamiento inmaduro del corazón o de su aparato respiratorio)y, está expuesto a ciertos factores de riesgo (como dormir boca abajo o con ropa de cama blanda o acolchada),durante un periodo crucial de su desarrollo.

Un estudio publicado en 2010 por el Journal of the American Medical Association, indica que los bebés que habían fallecido por muerte súbita tenían niveles de serotonina en el tallo encefálico, más bajos de lo normal. La serotonina ayuda a regular la respiración, el ritmo cardiaco y la presión sanguínea mientras dormimos.

FACTORES DE RIESGO.

Si bien se desconoce aún con certeza cuál es la verdadera causa de la muerte súbita, se han identificado factores de riesgo, que incluyen:

  1. Prematurez y bajo peso al nacimiento.
  2. Bebés nacidos de madres menores de 20 años de edad.
  3. Bebés que tienen muchos hermanos, particularmente si se llevan poca edad.
  4. Bebés que han presentado episodios que ponen en riesgo su vida (apnea, insuficiencia respiratoria).
  5. Pertenecer a ciertos grupos étnicos (el riesgo es mayor en afroamericanos y bebés nativos americanos). El índice más bajo corresponde a bebés hispanos y asiáticos.
  6. Sexo (los varones de todos los grupos étnicos tienen un riesgo ligeramente mayor que las niñas, en una proporción de 1.5 a 1).

MEDIDAS PREVENTIVAS.

Si bien no existe garantía de prevenir el síndrome de muerte súbita, puede reducirse significativamente, siguiendo las recomendaciones de la AAP, que se señalan a continuación:

  1. Acostar al niño boca arriba para dormir. Esta es la medida más importante. El índice de muertes causadas por SIDS ha disminuido un 50% desde 1994 cuando el Instituto Estadounidense de Salud Infantil y Desarrollo Humano, lanzaron la campaña “Back to Sleep” (Dormir Boca Arriba). Asegúrese que los demás familiares de los niños, niñeras, y encargadas de guarderías sepan que no tienen que acostar al bebé boca abajo, durante su primer año de vida. Existe un riesgo de 1.7 a 12.9 veces más alto en niños que duermen boca abajo que los que duermen boca arriba.
  2. Evitar uso de cosas blancas y peluches en la cuna del bebé. Asegurarse de no usar edredones o muñecos de peluche que pudieran incrementar el riesgo de SIDS.
  3. Evitar el uso de toallas o productos diseñados para que el bebé mantenga cierta posición (Sleep positioners). Desde el 2010 la Comisión para la Seguridad de los Productos de Consumo de los EE.UU. publicó una alerta, sugiriendo a los papás que dejaran de usarlos por la muerte de al menos una docena de bebés.
  4. Elegir cuidadosamente el colchón y la ropa de cama. Hay que acostar a los bebés en un colchón firme y plano, sin almohadas, juguetes ni otra cosa salvo una sábana ajustable sobre el colchón (es correcto si se coloca un protector delgado para el colchón debajo de la sábana). Evitar en lo posible el uso de edredones, cobertores, sofás, camas de agua o asientos suaves rellenos de bolitas que adoptan la forma del que se sienta en ellos.
  5. No utilizar protectores acolchados que bordean la cuna por sus cuatro lados (bumpers en inglés). Pueden causar asfixia, estrangulación o bien que el bebé quede atrapado, por otra parte evitan que el aire circule con facilidad alrededor del bebé.
  6. Evitar que el bebé duerma por periodos prolongados de tiempo en asientos infantiles, para el auto, carriola, columpio, sillas vibradoras, portabebés o rebozos. Esto es particularmente importante para bebés menores de 4 meses porque se pueden asfixiar si su cabeza se inclina demasiado hacia delante.
  7. Al cargar a los bebés en portabebés o rebozos. Asegurarse de que su cabeza y nariz no estén cubiertas o presionadas contra el cuerpo o el material de fabricación de dichos accesorios.
  8. Recibir atención prenatal con regularidad. Es fundamental para asegurar la salud del bebé y reducir el riesgo de prematurez y bajo peso.
  9. Evitar fumar, consumir alcohol y drogas durante el embarazo. Existen muchos estudios que aseguran son factores de riesgo de SIDS.
  10. Evitar que fumen alrededor del bebé. Asegúrate que se haga fuera de la casa. Hay estudios que muestran que el SIDS aumenta con cada fumador adicional de la casa, la cantidad de cigarrillos fumados por día y el tiempo de exposición al humo del tabaco.

 

Bibliografía.-

Hauck Fern, Family Physician and Public Health Science, University of Virginia November 2011.

 

Dr. Juan Antonio Del Río Martínez